domingo, 4 de diciembre de 2011

Ley de arraigo de puesteros, debe cumplirse y superarse

Saludando el trabajo y disposición de las y los senadores y diputados que impulsaron renovar la suspensión de desalojos de puesteros logrando recientemente la aprobación de la ley 8.140, queremos señalar algunos elementos del marco actual de la situación de la tierra y la ley de arraigo.

La reciente ley nº 8.140, vuelve a suspender por dos años “todo proceso de desalojo, títulos supletorios, cuya finalidad sea la modificación de situaciones de ocupación efectiva, tenencia, o determinación de derechos sobre los inmuebles de dominio privado del estado o de particulares, incorporados o que se incorporen en el futuro al programa previsto en la presente ley, cualquiera sea su estado, aún cuando se hallen en trámite de ejecución de sentencia”.

Se refiere entonces a suspender muchas de las situaciones que ponen en riesgo el uso de la tierra de las familias campesinas que crían animales y que en Mendoza se los ha denominado como “puesteros”.

La ley de arraigo fue sancionada en 1993, y tenía como objetivos más sobresalientes:
a) mejorar el nivel de vida de los puesteros y su grupo familiar, rescatando, promoviendo y difundiendo sus valores culturales;
b) posibilitar el perfeccionamiento de su organización social y económica;
c) evitar el aprovechamiento inequitativo de los puesteros y de su trabajo e industria por su situación de debilidad social y económica;
d) propender al acceso del puestero a la propiedad de la tierra, legitimar jurídicamente la posesión y tenencia ejercida por los puesteros en tierras fiscales, y en general, promover el saneamiento de sus títulos;

La ley preveía 2 años para sanear la situación de todas las familias de “puesteros”, sin embargo en 1995 se aplazó de nuevo esta suspensión por dos años más y desde ahí en adelante cada vez que se vence ese plazo, se va “renovando la suspensión”.
Leer todo el artículo
Existen cerca de 2000 familias registradas en el RUP (Registro Único de Puesteros) sin embargo se puede estimar que son más de 3.500 las familias de “puesteros” en Mendoza.

A pesar de existir la ley y la suspensión de desalojos y procesos judiciales, en la realidad las familias son acosadas y presionadas sistemáticamente por empresarios que quieren apropiarse de sus tierras. En los últimos años debido a la crisis internacional del sistema financiero muchos capitales buscan “refugio” “invirtiendo” en tierras y producción generando una nueva presión sobre las familias campesinas, a la que no escapan las tierras en manos de “puesteros”.

Lamentablemente, la ley de arraigo (Ley 6086) que generó diversos mecanismos para sanear las situaciones de tenencia de la tierra, no se cumple. Arraigo no cuenta con el presupuesto y la infraestructura que la coyuntura requiere, por lo que no ha podido resolver muchas de las situaciones que ha abordado.

Además, son escasos los jueces y fiscales que cumplen con esta suspensión de desalojos y procesos contra los puesteros; basta ver solo en los diarios mendocinos para comprender que son desalojadas familias que deberían estar protegidas por la ley. Además, en las comisarias, la mayoría de las veces sus denuncias no son consideradas y hasta han quedado detenidos los campesinos que han ido a denunciar.

Incluso tierras de frontera, que por otras leyes tampoco podrían ser propiedad de extranjeros, hoy están en manos de empresas malayas, francesas, y otras y han desalojado a “puesteros”.

Se impone entonces que las familias organizadas en comunidad tengan que defenderse solas de los atropellos buscando elementos jurídicos, pero también, lamentablemente, debiendo poner su cuerpo ante el avance inescrupuloso de empresarios.

Se hace urgente una política más activa, el estado no puede ser neutral, debe defender a los más vulnerables, a los más débiles, porque además los puesteros, los campesinos somos productores de alimentos, no solo parte del folclore.

Para finalizar, debemos también señalar algunas críticas a la ley de arraigo y expresar que es necesaria una ley más avanzada y menos discriminatoria:
La ley de arraigo solo considera que los campesinos mendocinos (puesteros) pueden producir cabras, vacas y equinos, y que solo pueden vivir en zonas de secano, es decir sin agua de riego. ¿Cuál es el motivo de esa discriminación? ¿Por qué un campesino no puede vivir en zonas con riego y sumar a su producción frutales y hortalizas? ¿Por qué no hay mecanismos para proteger a los campesinos que son poseedores en tierras con derecho de riego? Desde irrigación se otorgan permisos de agua para barrios privados y empresas extranjeras en zonas sin riego sistematizado, mientras miles de familias campesinas no tienen agua ni para sus huertas familiares.

Por eso, reclamamos que a la brevedad:
1- Se haga efectiva la Ley de arraigo
2- Se genere una instancia en la justicia para denunciar a jueces y fiscales que violan la ley de arraigo y los derechos posesorios de los campesinos.
3- Se genere una comisión del ejecutivo para denunciar a los policías que violan los derechos campesinos.
4- Se cree una comisión, con participación de representantes del ejecutivo provincial, las organizaciones campesinas, de pueblos originarios y de la agricultura familiar, para trabajar sobre una nueva ley que contemple toda la diversidad de sistemas productivos del sector y articule mecanismos para facilitar la permanencia y el acceso a la tierra y al agua de riego. Tal cual está previsto en el plan de desarrollo estratégico de la provincia de Mendoza.

Mendoza, 2 de diciembre de 2011

Ni un metro mas ! La Tierra es nuestra!
Unión de Trabajadores Rurales Sin Tierra
Movimiento Nacional Campesino Indígena
CLOC – Vía Campesina

http://ust-mnci.blogspot.com/, 02 – 12 – 11

La Quinta Pata

No hay comentarios :

Publicar un comentario