La Paz. El presidente Evo Morales reafirmó el martes la decisión de su gobierno de “defender” las gestiones conducentes a la obtención de una salida soberana al mar Pacífico para Bolivia y volvió a criticar al gobierno de Perú por demandar internacionalmente a Chile, por el dominio de aguas marítimas, y afectar, de coletazo, las históricas aspiraciones bolivianas.
“Que sepa (la administración de su par peruano Alan García que) el gobierno y pueblo boliviano van a defender su salida al mar y no es posible que, con algunas demandas, perjudiquen el retorno de Bolivia al mar”, deploró durante un acto militar en La Paz.
Morales rechazó en rotundo las acusaciones de “intromisión” formuladas en su contra por autoridades peruanas, después que el mandatario boliviano dijera poseer información sobre una eventual derrota de Perú en el juicio planteado a Chile en los tribunales internacionales de La Haya, por el dominio de casi 100.00 km2 en el Océano Pacífico.
“Son expertos en buscar ciertas maniobras para perjudicar a los bolivianos”, aguijoneó antes de defenderse de un torrente de acusaciones desatado en su contra por autoridades y legisladores peruanos.
Morales, que este martes recibió duras críticas por parte de la prensa peruana, dijo que el país que sufrió intromisión fue Bolivia.
“Quiero que sepa el pueblo peruano, pero también que haga una profunda reflexión el gobierno y algunos congresistas del Perú: no hay ninguna intromisión y si hablamos de intromisión (…) hace semanas vienen parlamentarios (peruanos) hasta Bolivia a investigar las supuestas casas del Alba. Eso se llama intromisión”, relanzó, al tiempo de volver a plantear sus cuestionamientos a una reciente decisión de Lima de brindar asilo a tres en funcionarios bolivianos procesados por la justicia doméstica.
“Eso es intromisión, meterse en asuntos netamente en la justicia boliviana, desvalorar a la justicia boliviana, a la Corte Suprema de Justicia” que se encuentra impedida de procesar a tres ex funcionarios, durante la administración del ex presidente ultraliberal Gonzalo Sánchez de Lozada (2002-03), formalizados por genocidio, a quienes el gobierno de Lima dio asilo y refugio políticos.
El canciller peruano, José García Belaúnde, que el lunes dijo que su país se retiraba del intercambio verbal con La Paz, justificó la decisión de Lima de brindar refugio a los tres ex ministros bolivianos porque, simplemente, no confiaba en la justicia boliviana.
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