sábado, 11 de octubre de 2008

Los bancos centrales de América Latina marchan por carriles propios ante la crisis

Lejos de coordinar sus esfuerzos, los bancos centrales de América Latina probablemente seguirán tomando medidas por separado para estabilizar sus monedas y prevenir que la crisis crediticia en el mundo desarrollado afecte la salud de las economías emergentes, informó un cable de la agencia Reuters.

Los bancos centrales en Brasil, México, Chile y Colombia han subido sus tasas de interés este año para atacar la inflación, pero ahora puede que tengan que seguir a los Estados Unidos de América y Europa en un recorte en momentos en que una caída en los precios de las materias primas afecta el valor de las exportaciones de la región y amenaza cinco años de crecimiento sostenido.

Aunque los balances de cuenta corriente y los presupuestos de los gobiernos de América Latina están en un estado mucho mejor que durante la crisis rusa y asiática de hace una década, las políticas y los problemas de cada país son lo suficientemente distintos como para impedir acciones regionales coordinadas.

“No me sorprende que no hayamos visto una acción concertada. Me hubiera sorprendido muchísimo si hubiera ocurrido”, dijo Rafael de la Fuente, economista jefe para América Latina de BNP Paribas en Nueva York, Estados Unidos de América.

“Una razón es que a pesar de los vínculos comerciales entre estos países, aún no están tan integrados. La mayoría son economías abiertas, pero abiertas a otras áreas más que hacia América Latina (...) en su conjunto”, agregó.

No hay una tradición de coordinación entre los estrategas de política monetaria en América Latina y algunos piensan que aún pudiera haber algo de mala leche por decisiones unilaterales adoptadas durante crisis pasadas.
Leer todo el artículo
“Las medidas del Brasil para intentar mejorar la competitividad y ciertamente la (depreciación) del real, tienen un impacto en la Argentina. Está levantando muchas preocupaciones en la Argentina”, dijo Daniel Kerner, analista de América Latina de Eurasia Group. “No existen los mecanismos institucionales de diálogo y revisión. Los problemas que enfrenta cada país son individuales y las soluciones también son, en su mayor parte, individuales”, añadió.

Ante un agravamiento de la peor crisis financiera desde la Gran Depresión, algunos bancos centrales dejaron atrás sus compras de dólares estadounidenses y, en cambio, optaron por una inyección de divisas en sus mercados.

Incluso, México abandonó una resistencia inicial y salió a defender a su golpeada moneda esta semana. “Esa es la primera línea defensiva”, dijo Igor Arsenin, jefe de estrategia latinoamericana de Credit Suisse en Nueva York. “Van a utilizar sus reservas bastante substanciales en moneda extranjera para intentar suavizar la volatilidad de las monedas”, añadió.

Analistas dicen que el Banco Central do Brasil puede considerar poner una pausa a una serie de alzas en las tasas de interés y recurrir aun más a sus reservas por u$s 200.000 millones para ayudar a mantener al real sobre los mínimos en 3 años y medio que marcó esta semana.

El Banco Central do Brasil ha vendido swaps en moneda extranjera y dólares estadounidenses en el mercado cambiario y suavizó los requerimientos de reservas obligatorias para liberar préstamos bancarios.

A medida que aumentan los temores a una recesión en los Estados Unidos, el Banco de México -central- también está bajo presión para relajar las condiciones monetarias pronto, por primera vez desde abril del 2006. México es el país comercialmente más dependiente de los Estados Unidos en América Latina.

Los analistas también esperan que el Banco Central de Colombia recorte las tasas de interés en noviembre o diciembre y el presidente Álvaro Uribe ha animado a tasas más bajas para apoyar el crecimiento, que se espera se desacelere a cerca de un 4,0% este año desde más de un 7,0% en el 2007.

Pero aún es temprano para decir si los bancos centrales o los gobiernos latinoamericanos tendrán que tomar medidas incluso más drásticas como la creación de dinero, una ampliación de las garantías de depósitos o la toma de control de bancos, dijeron analistas.

La extensión de la crisis forzó al Banco Central de Chile a un brusco cambio de estrategia la semana pasada, cuando detuvo un mecanismo de compra de dólares estadounidenses que inició en abril, originalmente programado por u$s 8.000 millones, debido a un desplome del peso frente a la moneda de los Estados Unidos.

Además, tomó medidas como swap de divisas y repos para inyectar liquidez al sistema, mientras coordina con el Ministerio de Hacienda licitaciones de depósitos en divisas de recursos del Tesoro público.

Mientras Brasil, México, Chile y Perú disfrutan de calificaciones soberanas en grado de inversión -que les permite recibir recursos de un mayor abanico de fondos-, otras economías de la región pudieran ser golpeadas más duro por la crisis.

La respuesta de la región ante la crisis “nos lleva a repensar el rol de la coordinación internacional de políticas monetarias y financieras. Es indispensable tomar medidas, pero debemos ser cuidadosos”, dijo esta semana el presidente del Banco Central de la República Argentina (BCRA), Martín Redrado.

La Argentina ya viene utilizando la intervención cambiaria y controles en los precios de bienes y servicios después de ser azotada por una profunda crisis en 2001-2002 y ahora está por completar su sexto año de fuerte crecimiento, aunque parece tener menos flexibilidad en sus reservas y finanzas, informó Reuters.

Mercosur Noticias, 11 – 10 – 08

La Quinta Pata

No hay comentarios :

Publicar un comentario