Rafael Calcines Armas
Bogotá. Colombia cierra la semana a la espera de la liberación unilateral de seis rehenes anunciada por las FARC y en controversia por la posibilidad de una mediación internacional para llevarlo a buen fin.
El domingo último las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) informaron la próxima liberación del ex gobernador del departamento de Meta Alan Jara, el ex diputado del Valle del Cauca Sigifredo López, tres policías y un militar.
El anuncio fue hecho en una carta dirigida al Comité Colombianos por la Paz, que mantiene un intercambio epistolar con las FARC, las cuales dejaron claro que se trata de un gesto a favor de un acuerdo humanitario.
Además de las liberaciones, la misiva propone "un encuentro de las fuerzas políticas y sociales interesadas en el cambio", que permita consensuar un gran acuerdo nacional hacia la paz, "para construir colectivamente alternativas políticas a la guerra y a la injusticia social".
El lunes, en la primera declaración oficial sobre el tema, el presidente Álvaro Uribe dijo que su gobierno dará todas las garantías para que se produzca la entrega de los liberados a una representación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Asimismo rechazó en esta oportunidad la mediación de personalidades extranjeras que caracterizó otras operaciones para liberar retenidos a principios del año, explicando que ello podría perjudicar las relaciones internacionales del país.
Anteriormente, la senadora liberal Piedad Córdoba, quien encabeza el Comité de Colombianos por la Paz, había manifestado que pediría al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, su cooperación en la posible liberación.
No obstante, Córdoba, a quien las FARC señalaron en su misiva que entregarán los retenidos, advirtió que depende del grupo insurgente la forma, lugar y coordenadas de la liberación y que todo se debe hacer con discreción y mucha seriedad.
En términos parecidos se manifestó el ex presidente Ernesto Samper, quien consideró que los buenos oficios del mandatario venezolano y la capacidad logística del vecino país pueden ser fundamentales para la pronta liberación de los rehenes.
Pero también propuso la participación de otros factores internacionales, como los gobiernos de Argentina, Ecuador y Brasil.
Por su parte, el destacado periodista Carlos Lozano, director del semanario Voz, opinó que la mediación internacional podría ofrecer mayores garantías para realizar felizmente las liberaciones.
Al respecto recordó que a pesar de la comprobada eficacia de la Cruz Roja en esos asuntos, no es descartable la suspicacia de la insurgencia debido a la ilegal utilización del símbolo de esa institución en la operación Jaque, a mediados de año.
Sin embargo, el viernes el ejecutivo reitero su rechazo a la mediación extranjera. No obstante, todas las partes coinciden en que lo fundamental es que las FARC anuncien definitivamente las coordenadas para realizar la entrega de los retenidos y llevar a buen término esta acción.
PL, 27 – 12 – 08
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