La realidad dramática del trabajo infantil

Por denuncias en el orden nacional ha vuelto al tapete de la realidad mendocina la situación de riesgo de vida de cientos de niños - muchos de ellos bebés aún - en los cientos de lugares de trabajo, más que nada en las empresas de empacadoras de ajo y en la cosecha de la vid, frutales de todo tipo, y en la aceituna. En estos lugares, además, numerosos menores trabajan, no obstante las leyes que lo prohíben, pero además totalmente desprovistos de seguridad física.

Cabe señalar que desde hace bastante tiempo los trabajadores vienen realizando denuncias sobre esta situación, como también por el sistema laboral, es decir las supuestas cooperativas de trabajo, los salarios, y otras condiciones laborales. Al respecto, en conferencia de prensa llevada a cabo en el local de ATE, un conjunto de madres y un delegado del personal, dieron a conocer en detalles esta precariedad en que se desenvuelven las tareas, sintetizadas en el siguiente documento:

"Con mucho esfuerzo se ha logrado sacar a la luz la explotación de niños en el campo y en las empresas ajeras de la provincia. Las trabajadoras madres de estos niños, que denunciamos públicamente desde hace años esta realidad, debimos sufrir el despido de nuestras empresas, la persecución de las cooperativas corruptas, la persecución y muerte de un delegado por la represión policial. Hoy no queremos dejar que se nos vuelva a imponer que nuestros hijos no tienen derecho a otro futuro que la violencia que les toca vivir. El 2009 debe ser el año en que en Mendoza dejaran de existir los NIÑOS ESCLAVOS.

"No queremos que las inspecciones del Estado desencadenen en multas que se sabe que nunca se han cumplido. Necesitamos soluciones concretas por parte del gobierno, y esta es OBLIGAR A LAS EMPRESAS A TENER GUARDERIAS para los más chicos, dentro de los lugares de trabajo, permitiendo un desarrollo normal y adecuado a sus edades, con la atención de profesionales capacitados. TALLERES de formación y recreación para los más grandes, donde aprendan a defenderse en la vida mientras disfrutan su niñez”.

"Exigimos que se disuelvan de inmediato las cooperativas truchas ilegales, como Barraquero y otras, que son una modalidad en empresas como esta empacadora".

Las denunciantes también señalan la pasividad de la justicia, que no aplica las sanciones que corresponden a estas infracciones a las leyes respectivas, y anunciaron que, de acuerdo a lo dictaminado por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, han resuelto la formación de un nuevo sindicato de la rama, ya que el actual – el Sindicato de Frutas y Hortalizas de Mendoza – ha hecho poco y nada por estas problemáticas. Las mujeres que estuvieron presentes, Antonia Trigo, Yesica Álvarez y Marta Molina fueron terminantes en estas denuncias y en la formación del nuevo sindicato. Esta denuncia, que ha tenido repercusión nacional, lo es también internacional, según afirmó Alicia Montoya, de la Fundación Alameda de Buenos Aires, entidad que encabezó la denuncia. En efecto, según Montoya, ya tres embajadas de países que tienen negocios con nuestro país estarían dispuestas a restringir las importaciones con empresas que estén involucradas en estas maniobras, evidentemente antisociales, pero con graves riesgos de vida contra niños y bebés incluso. Por su parte, el INADI, como asimismo organismos de derechos humanos de la provincia, manifestaron su repudio por esta situación de esclavitud laboral, el derecho de los niños, los adolescentes y sus familias. Agregaron que los empresarios del sector exportan la caja de ajo a 20 dólares, mientras que pagan por ella tan sólo entre 2 y 5 pesos.

Redacción La Quinta Pata, 26 – 02 – 09

La Quinta Pata