Proyecto Sur votó en general a favor el proyecto de Ley de Servicios Audiovisuales y en particular exigió nuevas correcciones. Entre el primer proyecto presentado por el oficialismo y el texto final hubo numerosas y fundamentales modificaciones promovidas por Proyecto Sur, las cuales decidieron el voto. Entre ellas, la exclusión de las telefónicas, la modificación parcial de la Autoridad de Aplicación y la definición del espacio como "bien público". Acá, "Pino" Solanas explica la decisión y asegura que ésta no es una ley del kirchnerismo.
De arranque, Proyecto Sur saludó la apertura del debate por la necesidad de cambiar la ley vigente de la última Dictadura Militar, pero una vez estudiada la letra chica del primer texto bajado a Diputados y por la forma en que se hizo, el diputado electo Solanas manifestó su disconformidad.
Entonces, Proyecto Sur presentó un proyecto de ley propio con 25 propuestas de modificación que consideró fundamentales para que la nueva ley de medios respetara el espíritu y contenido de los 21 puntos elaborados por la Coalición por una Radiodifusión Democrática (CRD). Así, Solanas llamó a defender estos principios, por lo cual exigió, en primer lugar, abortar el ingreso de las empresas telefónicas y modificar las características de la Autoridad de Aplicación.
Finalmente, el gobierno nacional cedió en muchos de los ítems propuestos por Proyecto Sur y otras fuerzas, lo cual fue saludado por Solanas durante la marcha realizada frente al Congreso el pasado martes. Así, el primer borrador inaceptable se transformó en un buen proyecto, aunque aún perfectible, y Proyecto Sur a través de su diputado Claudio Lozano votó a favor en general y cuestionó en particular todavía numerosos artículos.
Por la mañana del miércoles, "Pino" Solanas había manifestado su absoluto rechazó al procedimiento mediante el cual se llevó adelante el tratamiento en comisión del proyecto -por lo cual Lozano no dio quórum-, aunque se encargó de diferenciarlo del proyecto de ley en sí.
Finalmente, con las numerosas modificaciones, el texto que pasa al Senado se acerca más a los 21 puntos elaborados por numerosos especialistas y protagonistas de medios de la CRD, que lejos están de ser kirchneristas, lo mismo que Proyecto Sur, posición que en este reportaje aclara Solanas, quien afirmó que "es una tontería pensar que estamos alineados con el gobierno".
- ¿Cómo evalúa Proyecto Sur el proceso de debate que se dio en Diputados? Leer todo el artículo- Nosotros repudiamos el camino elegido por el gobierno nacional, al violar mecanismos de funcionamiento de la Cámara. Esta ley de la Democracia, que viene a reemplazar una de la Dictadura, lamentablemente nace manchada. Por eso nosotros no dimos quórum para iniciar la sesión. Luego que se logró el quórum participamos del debate, como en un primer momento lo hicieron todos los bloques.
Respecto a los contenidos del proyecto, si alguien me pregunta si el conjunto de la ley es un avance respecto lo que hoy tenemos en Argentina, por supuesto que sí. Claro que sigue siendo perfectible, como lo es cualquier ley. El oficialismo incorporó dos terceras partes de las cosas que nosotros sugeríamos. Por eso a diferencia de la oposición de derecha que luego se retiró de la Cámara, Claudio Lozano se quedó y votó a favor en general.
- ¿La "carne envenenada" de la que habló en algún momento quedó eliminada?
- En su mayor parte sí. Quedan algunas granadas, con las que no estamos de acuerdo. Por eso en particular votamos negativamente en esos puntos. La Autoridad de Aplicación fue mejorada, aunque podría haberse mejorado más aún. Nosotros proponíamos que fuera un organismo autárquico, público, descentralizado, con control parlamentario y sus miembros testeados en audiencia pública como ocurrió con los nuevos miembros de la Corte Suprema de Justicia.
- ¿Fue un debate express?
- Sí, y es una actitud repudiable porque le quitó el derecho a los diputados de mejorar la ley. El motivo fue acabar con las modificaciones que los sectores populares y democráticos estaban haciendo, dándole a la norma una validez que no tenía el proyecto original presentado por el oficialismo.
- ¿Y la oposición?
- No hay una sola oposición. Los que abandonaron el recinto y se negaron a debatir juegan a oponerse a todo. Es una actitud miserable e irresponsable. No se retiran por el procedimiento autoritario - como dicen - sino por su oposición a democratizar el espacio audiovisual y a la desmonopolización. Su objetivo es no discutir una nueva ley audiovisual, ni ahora ni nunca.
La oposición constructiva, dispuesta a debatir la ley, a proponer mejoras, a aceptar la voz de los otros, se quedó en el recinto. Hay que destacar la actitud del Partido Socialista y de Hermes Binner, que rompió en esta votación su alianza con la UCR y la Coalición Cívica. Es doblemente destacable porque aún viendo que sus aliados iban en otra dirección y se retiraban del debate, no dudaron en ser fieles a sus ideas y apoyar el proyecto. Desde distintas perspectivas, ambos somos muy críticos del oficialismo, pero no caemos en la miseria de la otra oposición. Hay que tener la grandeza de criticar lo malo pero también de aportar para lo bueno.
- ¿Y avalaría nuevas modificaciones?
- Nos hemos cansado de decir que no tenemos prejuicios. Hay quienes piensan que todo lo que viene del Gobierno o de la oposición hay que patearlo. Todo lo que es bueno para el país lo vamos a apoyar y vamos a criticar lo que es criticable. Acá parece que para no confundir a nadie hay que estar todo en contra o todo a favor. Esto no es blanco o negro.
- ¿No está en riesgo la libertad de prensa, como denuncia esa oposición de derecha?
- Se exagera mucho. Todo eso depende del organismo de control, y de los poderes de la República como la Justicia y el Parlamento, que no han dejado de existir. Hablan como si esta ley anulara todo. Esta ley introduce el control de la Sigen y de la Auditoría General de la Nación.
- Desde la oposición, lo acusan de haberse alineado con el Gobierno y señalan que este voto es una prueba de ello.
- Cada uno dice lo que se le da la gana. Tendrían que decir que 25 diputados de centroizquierda hoy son kirchneristas. Es una tontería, como creer que esta ley es kirchnerista. Eso es ignorar la cantidad de años que decenas de organizaciones sociales, de derechos humanos, de comisiones de comunicación, de legisladores y dirigentes, hemos luchado para cambiar la ley de la Dictadura. Este proyecto nace muchísimos años antes de que los Kirchner llegaran a la Casa Rosada. El kirchnerismo ha tomado esto, lo manipuló mucho. Por eso rechazamos el primer proyecto y creemos que el que sale finalmente con sustanciales modificaciones es un triunfo de un gran esfuerzo previo al kirchnerismo.
-¿El gran ganador es el gobierno?
- No. Ha sido un gran triunfo por la democratización y la desmonopolización del espacio audiovisual. Para nosotros es contribuir y defender el trabajo y los anhelos de todos esos sectores que mencioné y de las organizaciones que se expresaron en los 21 puntos, es un gran orgullo.
InfoSur, 17 – 09 – 09
La Quinta Pata
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