domingo, 14 de septiembre de 2014

20 años de prisión a los tres acusados por el crimen de un niño qom

La Cámara Segunda en lo Criminal de Presidencia Roque Sáenz condenó a 20 años de prisión a los hermanos Saturnino, Miguel Angel y Daniel Franco por el asesinato del niño qom Imer Flores en enero de 2013, bajo la carátula de "homicidio simple". No hizo lugar al planteo de la Fiscalía y las querellas que pidieron que se los condene por homicidio agravado por "odio racial".

La Cámara Segunda en lo Criminal de Presidencia Roque Sáenz Peña condenó a 20 años de prisión a los hermanos Saturnino, Miguel Angel y Daniel Franco por el “homicidio simple” del niño qom Imer Flores asesinado el 5 de enero de 2013 en Villa Río Bermejito. La sentencia fue dada a conocer este viernes por la jueza Fanny Alicia Zamateo.

“Qué importante en materia de reivindación de derechos que resulta esta sentencia. Creemos que se ha hecho justicia”, afirmó el abogado querellante de la familia de Imer Flores y asesor del Programa Ciudadanía Indígena de la Junta Unidad de Misiones (JUM), Gonzalo García Veritá, en declaraciones a RADIO CIUDAD, minutos después de conocida la sentencia. “Se sabe la verdad, y una verdad de la democracia”, recalcó.

El abogado consideró que el fallo condenatorio “consolidó parte de la teoría del caso que mantuvimos desde la acusación privada y de la querella del Estado de homicidio y se condenó a la pena de veinte años de prisión a los tres imputados”.

En ese sentido, García Veritá señaló que “estábamos convencidos de que había una responsabilidad penal plural, que no había sido una sola persona la que había cometido este delito”. Y agregó que “durante el proceso se ha producida prueba suficientemente importante para llegar a una sentencia de este tipo, una sentencia condenatoria. Veinte años de prisión es una sentencia sumamente calificada”.

“Estamos conformes con el trabajo que hemos desempeñado y que ha sostenido el Ministerio Público Fiscal”, destacó el abogado querellante.

“Aún no leímos los fundamentos”

Más allá de la conformidad con la sentencia, García Veritá advirtió que “hay una pequeña diferencia con la acusación que habíamos planteado desde la querella privada y la del Estado, y que había sostenido el fiscal también, de homicidio agravado por odio racial”.

“Es muy breve la sentencia, aún no hemos leído los fundamentos de la jueza por los que ella decide sostener la acusación formulada en primera instancia por la fiscal de investigación sobre homicidio simple y condenar dentro de la escala de ese delito”, precisó.

“Una verdad de la democracia”

García Veritá destacó que “creemos que se ha hecho justicia, creemos que se sabe la verdad, y una verdad de la democracia”. “Qué importante cuándo el que habla no es el abogado de un lado o del otro, lo importante es cuando habla la democracia, cuando se han respetado los procesos del juicio penal, cuando se ha dado la posibilidad a las defensas de plantear todas las herramientas y todos los derechos que hacen a los acusados y a la querella de plantear cuestiones que creíamos que eran muy importantes”.

“Ojalá sirva para la generación de políticas públicas específicas para la eliminación de la discriminación racial en estos lugares”, confesó García Veritá. Y agregó que “hemos pedido probar un contexto sumamente generalizado de violencia respecto de los pueblos indígenas que se contradice mucho con los paradigmas de interculturalidad que tanto el gobierno de la provincia como el gobierno federal están tratando de impulsar”.

Benedetto: “Es un fallo ejemplar”

Por su parte, el representante de la querella por parte del Estado chaqueño, Tomás Benedetto, consideró que “la sensación es que se hizo justicia, de que es un fallo ejemplar”. También recalcó la decisión política que en su momento tomó el gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, de que el gobierno provincial impulse la investigación del crimen.

“Hemos logrado este fallo que a todas luces demuestra la culpabilidad de los hermanos Franco y trae un manto de justicia hacia los familiares y hacia todas las comunidades indígenas de la provincia”, sostuvo.

Con respecto a la sentencia, Benedetto reconoció que “estaba dentro de las posibilidades”, y recalcó que “esperábamos un fallo con una condena alta como la que se dio”.

“A simple vista se han valorado ciertos hechos que hacen a que la condena sea alta, que también marca el grado de responsabilidad de los imputados en la causa”, concluyó el abogado que representó al gobierno del Chaco en la causa.

El caso

El cuerpo de Imer Ilbercio Flores, de doce años, fue hallado sin vida en la madrugada del sábado 5 de enero de 2013 a pocos metros de la playa del camping municipal de Villa Río Bermejito, en pleno Impenetrable Chaqueño, a más de 300 kilómetros de Resistencia, con signos de haber recibido una brutal golpiza. Tras el hallazgo, la policía detuvo a Saturnino "Nino" Franco como el principal sospechoso del crimen y luego a sus hermanos Miguel Angel y Daniel, sobre quiénes se sospechaba también habían participado del brutal ataque. Los tres fueron procesados e imputados por el delito de “homicidio simple”. El caso tomó trascendencia nacional y a los pocos días el por entonces gobernador del Chaco, Jorge Capitanich, se comprometió ante los padres de Imer, Fariseo Flores y Rosa Talero, a que el Estado chaqueño se constituiría en querellante para impulsar el esclarecimiento del atroz asesinato del niño de la etnia qom.

Fuente: Chaco Día por Día

La Quinta Pata