Bonn. El cultivo de materias primas para la producción de biocombustibles se ha convertido ya en la segunda causa de deforestación en Latinoamérica, declaró hoy el presidente de la Global Forest Coalition, Miguel Lovera.
La ONG presentó en la Novena Conferencia de las Partes (COP9) de la Convención de Biodiversidad de la ONU un informe de control, elaborado en 22 países, en el que se constata que sus gobiernos han hecho poco o nada por aplicar las directrices de la Convención en la protección de bosques.
Según Lovera, la reconversión de terrenos de bosque en campos para cultivo en América Latina sigue estando motivada, en primer lugar, por la rentabilidad de la producción de forraje, aunque las materias primas para la fabricación de biocombustibles ya han superado a la alimentación humana como segunda causa.
Calificó de contradicción que desde los Gobiernos se apunte a los biocarburantes como método para reducir las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera si, como contrapartida, es necesario acabar con los bosques y la biodiversidad del planeta.
Leer todo el artículo - CerrarLovera, quien coordinó la recopilación de datos en Paraguay, afirmó que el uso de maquinaria necesaria para acondicionar un área de bosque para el cultivo de materias como la caña de azúcar, la soja o la palma de aceite, de la que se extraen los biocarburantes, supone muchas más emisiones que el uso de combustibles fósiles.
El uso de los biocombustibles permite reducir las cuotas de emisiones de los países industrializados pero dispara las de las naciones en vías en desarrollo y el dióxido de carbono termina en la atmósfera igualmente, señaló.
Explicó que cualquier decisión internacional sobre protección de la biodiversidad que no tenga en cuenta el coste de oportunidad de la tierra y las ventajas que supone para un pequeño propietario vender o arrendar sus terrenos a las grandes empresas agrícolas es letra muerta.
El informe de la Global Forest Coalition, que analiza, entre otros, la situación de los bosques de México, Paraguay, Costa Rica, Ecuador y Brasil, evidencia que, a escala global, predominan los proyectos aislados por encima de los programas integrales de protección.
La coordinadora de las investigaciones realizadas en Brasil, Camila Moreno, afirmó que en algunos estados del país se duplicó el ritmo de deforestación en el primer trimestre del año, con respecto al mismo periodo del año anterior.
Afirmó que datos como estos han sido decisivos en la dimisión de la ex ministra brasileña de Medio Ambiente, Marina Silva, una de las principales defensoras de la Amazonía.
Moreno lamentó que el límite de la selva amazónica se sitúe donde terminan los agro-negocios que, según dijo, han convertido a Brasil en el mayor exportador del mundo de carne, soja, cereales, zumo de naranja, café, azúcar y bioetanol, mientras se marginan productos de primera necesidad, como el arroz.
También aludió a la presión de las multinacionales sobre las autoridades para rebajar las cuotas de zona de bosque que deben preservar en sus propiedades y auguró un futuro muy oscuro para la Amazonía.
La Conferencia de las Partes es el órgano máximo de la Convención sobre Diversidad Biológica (CDB), primer acuerdo mundial que aborda integralmente todos los aspectos de la diversidad biológica, desde recursos genéticos hasta especies y ecosistemas.
La CDB fue propuesta en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medioambiente y Desarrollo, bautizada como "Cumbre de la Tierra" que se celebró en junio de 1992 en Río de Janeiro.
Fuente: Terra/EFE
No hay comentarios :
Publicar un comentario