Alfredo Saavedra
Los medios en Occidente obedeciendo la consigna de Washington y sus aliados, engañan a la opinión pública internacional haciendo aparecer a la organización palestina Hamas, como los villanos en el conflicto que ha tomado las características de una acción criminal de parte de Israel, que castiga en estos días en forma despiadada a la población de Gaza donde utilizando armas no convencionales el ejército israelí está asesinando en forma indiscriminada a la población civil, que incluye gran cantidad de niños.
El presidente Zarcosy, de Francia, calificó de irresponsables a los miembros de la milicia de Hamas por el lanzamiento de proyectiles sobre territorio detentado por Israel y en términos similares pero exponiendo su complicidad con la retórica del gobierno judío, se manifestó el presidente Bush, partidario incondicional de la política de agresión israelí. Eso se da por descontado porque los Estados Unidos tienen como brazo armado a Israel en su ofensiva contra la región árabe consecuente con los palestinos.
Para disipar toda duda de que a la agrupación Hamas le asiste toda la razón en el rompimiento del alto al fuego acordado antes de la actual crisis, se tiene que tomar en cuenta de que ese acuerdo de alto al fuego en ningún momento fue respetado por Israel pues la hostilización contra la población pacífica del territorio de Gaza se manifestó con agresiones físicas continuas a labriegos palestinos con sus parcelas usurpadas por los judíos de los asentamientos ilegales en los bordes de la franja gaceña. La televisión Al Jazeera exhibió recientemente escenas donde hombres judíos golpeaban de manera cobarde a mujeres palestinas en las mencionadas parcelas.
Hay consenso en las organizaciones de derechos humanos internacionales de que Israel ha convertido en la cárcel más grande del mundo al territorio de Gaza, donde un millón y medio de habitantes están prisioneros en lo que puede considerarse sin eufemismos un gran campo de concentración donde la población está sujeta a las decisiones de Israel, cuyo más criminal acción ha sido la del bloqueo sin límites, creando exasperación en los habitantes de ese territorio. Durante diferentes períodos el gobierno israelita ha mantenido privada a la población de la franja de los más elementales recursos para la supervivencia. ¡Qué memoria la de los judíos que se olvidan del tan cacareado holocausto para mantenerse como víctimas permanentes de ese crimen de lesa humanidad y ahora ellos son perpetradores de otra injusticia que quisieran hacer desembocar con iguales consecuencias!
El problema se origina en la desproporcionada rapiña de Israel, que no satisfecho con haberse apropiado de la mayor parte del territorio palestino quiere subyugar a los habitantes de las mínimas porciones con que se quedaron los árabes luego de la desigual distribución otorgada a los judíos tras la creación de su estado.
Sin la presencia del grupo armado, con estatus político, de Hamas, es indudable que Israel ya hubiera avanzado más en sus afanes expansionistas sobre la migaja de territorio de los palestinos. La oposición terminante de Hamas de negarle el derecho a existir al pueblo judío, es tan absurda como mucho más lo es la prepotencia de Israel. Los judíos históricamente tienen sus raíces en parte de ese territorio, pero eso no les da derecho a sojuzgar a la población palestina, que a través de sus grupos armados se ha mantenido a la defensiva ante la agresión israelí. Los ataques de Hamas con sus misiles de fabricación casera, han tenido en el pasado más bien una expresión de rebeldía ante la frustración de su pueblo desgarrado por la impotencia ante el poderío de Israel y su ejercicio de dominación avasallante.
La Quinta Pata, 08 – 01 – 09
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