Disparos con perdigones, lesiones con arma blanca y salvajes golpizas, con el resultado de heridos hospitalizados y un detenido en estado de coma, tras la represión de un pacífico reclamo de los presos para que se respete el horario de visitas.
Los detenidos de la unidad 24, del Penal de Varela, se recluyeron la semana pasada en el pabellón D1, exigiendo se respete el horario de visitas, pues los familiares deben soportar esperas que en algunos casos superan las 7 horas.
Este reclamo se repite en esta unidad desde hace varios meses sin haber tenido ninguna respuesta por parte de las autoridades del penal o el servicio penitenciario provincial, más que la represión y la instalación del terror.
Los detenidos que no están hospitalizados fueron ferozmente golpeados y trasladados en su mayoría a la unidad número 29 del mismo penal.
Nuevamente el Gobierno de los derechos humanos responde con balas, sangre y humillación a las víctimas de este sistema siniestro que condena al extermino a los que ya estaban prisioneros de la pobreza y la completa exclusión.
Agencia Walsh, 30 – 07 – 09
jueves, 30 de julio de 2009
Nacional
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