Emilio Marín
Ante el fallecimiento del ex presidente, la pregunta era cómo seguiría la política sin él. La respuesta se vio en este mes: más o menos como era entonces, con varias manos de cal y otras de arena.
Néstor Kirchner fue recordado al cumplirse un mes de su súbito fallecimiento, en el ámbito nacional e internacional.
En Buenos Aires hubo actos y festivales en el Cabildo con un cierto dejo maoísta de "que florezcan mil flores", como paso previo a un recital en Plaza de Mayo.
En esas actividades estuvo la mano de la Secretaría de Cultura de Jorge Coscia, pero también de los intelectuales de Carta Abierta y un sinnúmero de agrupaciones juveniles, políticas y sociales. Estas tienen el común denominador del kirchnerismo y una lista importante de diferencias y recelos.
La idea de estos círculos es que ha muerto Kirchner y nacido el kirchnerismo como una fuerza amplia y transversal que trasciende al Partido Justicialista. Los homenajes no fueron inocentes en este sentido.
Y los dirigentes que acompañaron al patagónico pero nunca perdieron su condición de PJ (Daniel Scioli y Hugo Moyano), han protestado por aquella interpretación. No quieren saber nada con la transversalidad y pretenden reverdecer el aparato justicialista.
Como corresponde al peronismo, unos y otros juran lealtad a Cristina Fernández, mucho más ahora que ha enviudado y se le suele quebrar la voz. Será cuestión de ver cómo evoluciona esa interna justicialista, clave para saber lo que ocurrirá en el país. Es que los sondeos de opinión siguen ubicando al tope a la presidenta, con 45 % de intención de voto para octubre de 2011.
Leer todo el artículoLos otros homenajes a Kirchner se rindieron muy lejos de Buenos Aires, en Guyana, en la IV Cumbre de Unasur, de la que fue secretario general. "Los sueños de él eran los sueños de todos los sudamericanos", aseguró Lula da Silva, al hablar en esa reunión. Otros oradores fueron el ecuatoriano Rafael Correa, el dueño de casa Bharrat Jagdeo y la propia Cristina. El encuentro del bloque se convirtió básicamente en un homenaje a Kirchner, pues además de esos discursos se aprobó una declaración en su honor y se dispuso ponerle su nombre a la sede de la entidad, en Ecuador.
La reunión consensuó un "Protocolo Democrático" contra los golpes de Estado, pero no designó al sucesor de Kirchner. Se seguirá conversando sobre este y otros tópicos en un aparte de la XX Cumbre Iberoamericana en Mar del Plata, el 3 y 4 de diciembre próximo. Así, de apuro o en intervalos de esa reunión más amplia, es poco probable que lleguen a acuerdos firmes y quizás tengan que aguardar una nueva cita sudamericana. Al progresismo no le resulta sencillo llegar a acuerdos con la derecha expresada por Juan M. Santos, Sebastián Piñera y Alan García.
Cal y arena
A los que se interrogaban sobre qué rumbo tomaría su gobierno tras el fallecimiento de su marido, Cristina Fernández a lo largo del mes ha dejado una respuesta bastante clara. Podría sintetizarse así: "seguiré haciendo básicamente lo mismo, ¿para qué cambiar si así me ha ido bien?"
Esa gestión no es la pésima que demonizan los medios de comunicación de la oposición, sobre todo Clarín. Estos, amén de cuestionar todo lo que hace el gobierno, le agregan un fuerte plus al deformar y hasta inventar lo que no ha ocurrido (como el supuesto diferendo con Brasil, que no era tal, o los sobornos a diputados para aprobar el presupuesto nacional, que tampoco existieron).
Con esa óptica destructiva a ultranza a todo lo que proponga la presidenta, no habría nada que rescatar. Y en la semana se produjeron noticias positivas, como el anuncio de pagar 500 pesos en diciembre a los jubilados que ganan la mínima, un contingente que abarca el 84 por ciento del total.
También cabe ubicar en la columna del "Haber" a la inscripción gremial n° 1381/10 que por fin, luego de varios años de pugna, beneficiará a los empleados de la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Metrovías, escindidos de la burocracia de la UTA. Finalmente la cartera de Trabajo hizo efectiva esa inscripción, que llevará a la normalización del nuevo gremio con mayores derechos y obligaciones, y en un futuro, cotejando padrones de afiliados, podrá disputar con UTA cuál es el más representativo en el sector.
El ministro Carlos Tomada aseguró que firmó esa inscripción porque ahora está asegurada la prestación del servicio a los pasajeros. Es al revés: si Trabajo hubiera firmado cuando se lo pidieron, años atrás, el servicio se hubiera salvado de varios paros y demoras que fueron la consecuencia no querida por esos trabajadores clamando por su reconocimiento.
Hay que destacar las condenas de estas semanas a los genocidas en La Pampa y Mendoza, y el acercamiento del dictado de otras tantas en el juicio de Córdoba y el del circuito ABO. Si bien no se trata de una obra propia del gobierno sino ante todo de los organismos de derechos humanos, pero está claro que aquel ha ayudado y mucho. Esta cosecha de memoria y verdad, sembrada por tantas manos, institucionales y comunes, tiene una enorme importancia para reparar en parte el daño del terrorismo de Estado y para educar política y culturalmente al soberano sobre que tamaños delitos no deben permitirse en el futuro. Las repercusiones del crimen de Mariano Ferreyra y el avance de la causa judicial indican que aquella cultura democrática está en auge.
Naturalmente que la columna del "Debe" también existe, mal que les pese a las organizaciones políticas afines al gobierno nacional, creyentes de que todo o casi todo lo realizado se merece un "diez felicitado".
Y no es así. El giro pro-empresario que viene dando la presidenta, ya comentado en esta columna, y la represión a los pueblos originarios de Formosa con un muerto, luego de órdenes emanadas de un gobernador asociado al kirchnerismo, son ejemplos de que hay bastante por corregir y autocriticar.
Dos jugadas claras
La pésima noticia de la semana fue el fallo del juez Edmundo Carbone, el pionero en otorgar medidas cautelares a Clarín, ratificando que su fallo favorable a ese grupo no tiene tiempo preciso de vigencia. De ese modo Ernestina de Noble y Héctor Magnetto podrán aguardar con una cuota de mayor optimismo los trámites adversos que en cierto modo los tienen cercados. La primera está preocupada por lo que surja del análisis de ADN a muestras de sus dos hijos mal adoptados; el segundo, teme la denuncia oportunamente hecha por la Secretaría de DD HH de la Nación por los delitos que pudieran haberse cometido en la apropiación de Papel Prensa.
En esas circunstancias complicadas, el fallo de Carbone los consuela y da un poco de tranquilidad. El procurador del Tesoro, Joaquín da Rocha, presentará sus apelaciones contra los resuelto por el magistrado, pero no hay seguridad de que sus escritos den en la tecla, luego de las denuncias que Horacio Verbitsky le hizo en Página/12 a ese funcionario ligado a Scioli.
Teóricamente los grupos mediáticos deberían amainar un poco sus frenéticos ataques al gobierno, teniendo en cuenta ese fallo tranquilizador de Carbone y el hecho de que en la oposición política no cuentan con dirigentes con intención de voto. En sectores del peronismo federal (casos Carlos Reutemann, Felipe Solá y Francisco de Narváez), campea un cierto "desensillar hasta que aclare". Eso más el ocaso en que parece haber entrado la figura antes consular (para esos medios) de Julio Cobos, harían aconsejable a Clarín y La Nación tomarse algún sedante.
La última experiencia, de su denuncia sobre la supuesta compra de voluntades en Diputados, que la Comisión de Asuntos Constitucionales mandó a archivo, los dejó totalmente en offiside.
A diferencia de los editores de esos diarios, Elisa Carrió tiene el recurso de tomarse una enésima vacación y borrarse por varias semanas, como lo hizo en esta oportunidad. En cambio Morales Solá, Kirschbaum, Van der Kooy y otros tienen que seguir escribiendo o hablando casi todos los días. ¿Levantarán un poco, aunque sea un poco, el pie del acelerador en sus embestidas contra la presidenta? Podrían hacerlo, un poquito en razón de que no tienen presidenciables propios capaces de enamorar a una parte significativa del padrón. Y otro poquito, porque el ánimo del establishment empresarial no está tan levantisco, luego del giro de la jefa de Estado hacia las corporaciones empresarias.
De todas maneras hay dos jugadas opositores que siguen su rumbo.
Una es la fórmula de un "Frente Progresista", con Ricardo Alfonsín y Hermes Binner, que aglutinaría al GEN y el juecismo. Estos aliados necesitan primero vencer en la interna radical y postergar a Cobos.
La otra movida es de Pino Solanas, que quiere ocupar el mismo espacio de la alianza radical-socialista, para lo cual está juntando retazos de la CTA, ARI, MST, etc. Al cineasta le convendría que gane Cobos en la UCR, porque tendría más desprendimientos en su dirección. Si la fórmula es Alfonsín-Binner, con Stolbizer en Buenos Aires, entonces Solanas podría intentar un acuerdo y ofrecerles apoyo a nivel nacional a cambio de que lo secunden para jefe de gobierno porteño.
Parecen especulaciones de una política pequeña. ¿Pero quién dijo que luego de la muerte de Kirchner la política argentina sería – mágicamente – grande, ética y patriótica?
La Arena, 28 – 11 – 10
La Quinta Pata
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