Évelin Torre
A cuatro años de la condena por el asesinato del "Negrito" Floreal Avellaneda, el Tribunal Oral Federal de San Martín revirtió ayer tres absoluciones parciales y condenó por su participación en el homicidio al ex comisario de la policía bonaerense Alberto Aneto y a los militares que actuaron en el centro clandestino de detención El Campito, César Fragni y Raúl Harsich.
Así, el Tribunal elevó de 14 a 16 años de prisión la pena de Aneto y de 8 a 12 las de Fragni y Harsich, quienes actualmente gozan hasta de prisión domiciliaria pero, de quedar firme la sentencia, pasarían al penal de Marcos Paz.
Floreal “el Negrito” Avellaneda tenía 15 años cuando lo mataron. En la madrugada del 15 de abril de 1976, aproximadamente ocho vehículos rodearon la casa de la familia, en un procedimiento que tenía por objeto detener a Floreal padre, pero al no encontrarlo, tomaron al Negrito como rehén, junto a su madre. Fue la última vez que Iris, quien permaneció dos años detenida, vio a su hijo.
El cuerpo de Floreal fue hallado el 14 de mayo de 1976 en aguas del Río de la Plata. Tenía graves muestras de haber sufrido degradantes torturas físicas y haber sido víctima de un horroroso empalamiento, tal como lo denunció el escritor y periodista Rodolfo Walsh en su “Carta Abierta a la Junta Militar” : “(...) incluyendo el chico de 15 años Floreal Avellaneda, atado de pies y manos, con lastimaduras en la región anal y fracturas visibles”.
Por el asesinato, el 12 de octubre de 2009, la Justicia condenó a prisión perpetua al ex comandante de Institutos Militares, Santiago Omar Riveros; a 25 años al ex jefe de Inteligencia de Campo de Mayo, Fernando Verplaetsen; y a 18 al ex titular de la Escuela de Infantería, Osvaldo García. Penas más leves recibieron Fragni y Harsich (8 años), y Aneto (14 años) debido a que sólo se probó su participación en el secuestro y las torturas al joven.
La familia de Avellaneda junto con las querellas de la FJC y la Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH) apelaron esa parte del fallo. La Cámara de Casación les dio la razón y ordenó al Tribunal Oral que lo revisara.
Lo novedoso de este fallo es que es la primera vez en la corta historia de los juicios de crímenes de lesa humanidad en que se revisa un fallo de un Tribunal de Primera Instancia, aumentando las penas de los imputados.
La primera audiencia iba a ser el 11 de septiembre pasado, pero los defensores oficiales renunciaron en el medio de la audiencia. Sin embargo, la abogada Mariana Grassi luego volvió a defender a los militares, lo que claramente podría interpretarse como un intento de demorar la audiencia.
Lo cierto es que no hubo chicana que pueda salvarlos. Finalmente la audiencia se llevó a cabo con el resultado anunciado y hoy podemos celebrar que la Justicia llegó para el Negrito.
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