Según diversos medios provinciales en la tarde del 15 de abril, el demócrata Juan Carlos Aguinaga comunicó al gobernador Celso Jaque que dejaba el ministerio de Seguridad
La razón de su alejamiento se basa en la lucha constante de los organismos de derechos humanos – que el 25 de marzo pasado movilizaron más de 5.000 personas por el centro de la ciudad (ver La Quinta Pata – Noticias, “Marcharon contra la política de seguridad de Jaque” 26-03-08) – que cuestionaron y repudiaron al ministro y a su subsecretario, el sospechado represor Carlos Rico. Los organismos y otros grupos políticos y sociales han reclamado sin pausa la dimisión de ambos funcionarios, en especial la de Rico por su participación represiva durante la dictadura procesista.
Según Los Andes un referente de los gansos se preguntaba hace unos días “... si vale la pena este esfuerzo [de mantener la alianza con el PJ gobernante] y poner en riesgo el capital de votos cuando el gobierno no termina de darnos todo el apoyo necesario”. Precisamente una noticia del Diario Uno aduce que la salida de Aguinaga se debería a que el Partido Demócrata resolvió romper lanzas con la gestión justicialista. El referente máximo del PD, Omar De Marchi, hizo referencia a “un hostigamiento constante y permanente de la ‘mini-pyme’ de los organismos de derechos humanos” a los funcionarios del ministerio de Seguridad; el dirigente manifestó a Radio Nihuil que el ambiente en esa instancia gubernamental “era irrespirable”. Asimismo el matutino de los Vila indicó que la renuncia se debería a “... declaraciones y acciones de funcionarios del propio Gobierno (...), como el subsecretario de Justicia, Diego Lavado, y el titular de la Dirección de Derechos Humanos, Pablo Salinas”.
Leer todo el artículo - CerrarLa columna “Hoy por hoy” del mismo diario opina que a Jaque se le agrega “un terremoto” a los problemas que ya tenía cuando en realidad el supuesto terremoto comenzó al emerger las denuncias contra Rico y las torpes e inoportunas intervenciones y acciones del ministro. En todo caso el gobernador ahora deberá reconstruir el daño causado por haber nombrado a semejante funcionario.
MDZ Online, por su parte, informó que si bien los motivos del alejamiento son políticos, del mismo modo obedecen “a las promesas que Jaque hizo” con respecto a la seguridad de los mendocinos “y no cumplió”. Por otro lado, la cuestión del supuesto estupor en las filas de Jaque causado por la noticia de la renuncia no se condice con el hecho de que la misma parecía estar cantada desde hace semanas.
A pesar de que la renuncia de Aguinaga trascendió en la tarde del 15 de abril, el mandatario mendocino no la ha confirmado. Una vez más, Celso Jaque hace la del avestruz: cuando se presenta un problema su primera reacción es borrarse. El único que ha dicho algo hasta el mediodía del 16 de abril es el secretario General de la Gobernación, Alejandro Cazabán, que es candidato a quedarse con el ministerio en apuros: “no se ha recibido todavía la renuncia de Aguinaga.”
Redacción, La Quinta Pata, 16-04-08
No hay comentarios :
Publicar un comentario