Anabel González
Hubo días de visitas y ventas "cero". Este fin de semana se concentraron todas las presentaciones en sesiones maratónicas. Los libros más pedidos no estaban a la venta por problemas en la organización.
En la 35ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, marcada por una caída general en la cantidad de visitantes, el stand oficial de Mendoza atrajo interesados por el vino y la montaña. Sin embargo, por problemas de organización, no estuvieron a la venta los libros más pedidos.
Casi desaprovechado quedó el stand pintado de color naranja semejante al logo institucional de la Secretaría de Cultura, de dos pisos y 39 metros cuadrados. El sábado y domingo pasados hubo once presentaciones de libros mendocinos, en dos jornadas maratónicas, pero durante las dos semanas y media que duró la feria sobraron los días de ventas "cero".
Es que los visitantes se acercaban a preguntar, principalmente, por obras que se refirieran al cerro Aconcagua y al turismo. Sin embargo de estos temas había un solo libro en exposición (Aconcagua, la cima de América, de Mauricio Fernández, que cuesta $100), pero no estaba a la venta "porque la editorial no trajo un facturero ni suficientes ejemplares", explicó una de las esbeltas promotoras, también de uniforme naranja.
Andrés Oliver, a cargo del Área Letras de la Secretaría de Cultura de Mendoza, y responsable de la organización, excusó: "En realidad no apuntamos a la venta, porque es un stand oficial. Traemos los libros de Ediciones Culturales de Mendoza y comprometemos a otras editoriales mendocinas para que expongan".
Simplemente, "queremos que se note la imagen de Mendoza", dijo el también poeta, pese a que el stand provincial estaba en una esquina rodeado de editoriales y librerías nacionales, a diferencia de Córdoba, Santa Cruz o Chubut que emplazaron sus libros cerca de las entradas.
Fue por esa falta de visión del "negocio" que implica la feria para los libreros, que los aficionados al andinismo o interesados en las bellezas turísticas de la provincia salieron con la cabeza gacha, luego de haber recorrido en vano toda La Rural buscando el bendito stand 2313 de la cultura mendocina.
Leer todo el artículo
No hay comentarios :
Publicar un comentario