Silvina Agüero
Por primera vez en nuestra historia un presidente argentino es procesado por cohecho.
Finalmente, uno de los casos más bochornosos ocurridos en nuestro país en los últimos años, parece dar un gran giro y entrar en la etapa final hacia su resolución ante la justicia. El juez federal Daniel Rafecas que entiende en la causa sobornos en el senado de la nación desde la gestión de Kirchner y con una resolución de más de 1.000 carillas, decidió imputar a los legisladores: José Genoud; Emilio Cantarero, Augusto Alasino, Remo Constanzo, Alberto Tell y Ricardo Branda. Lo mismo ocurrió con el ex ministro de trabajo durante la presidencia de De la Rúa; Alberto Flamarique; el ex jefe de la SIDE, Fernando de Santibañes, el “arrepentido” Mario Pontaquarto y el mismo Fernando De la Rúa, quien también deberá declarar ante la justicia en los tribunales de Comodoro Py.
No sé por qué causa tanto revuelo, si esto no cambia en nada, se está montando un escándalo nacional con la noticia, aseguró ofuscado el ex mandatario de los argentinos.Todo comenzó cuando el ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto confesó que, en el momento que el gobierno de De la Rúa negociaba la sanción de reforma de la ley laboral, hubo una reunión en la casa rosada en la que el ex senador radical José Genoud, (hoy fallecido), le dijo al entonces presidente que el PJ estaba
necesitando de otras cosas para tratar el proyecto , a lo que De la Rúa habría respondido,
Eso arréglenlo con el jefe de la SIDE , Fernando De Santibañes. La declaración del arrepentido resultó clave para el procesamiento del ex mandatario. En el fallo, el juez Rafecas dio esa reunión por probada y consideró que su finalidad fue que los peronistas tuvieran
garantías de que el propio presidente de la Nación estaba al tanto y aprobaba la ilegal iniciativa . El tribunal consideró en su resolución que el pago de sobornos en el senado para aprobar la reforma laboral
fue un acto del Gobierno liderado por Fernando de la Rúa como presidente .
Leer todo el artículoPor otra parte, es importante destacar también que los bienes de Flamarique, Fernando de Santibañes y Pontaquarto fueron embargados entre 1 a 7 millones de pesos. También fueron procesados por cohecho activo agravado, es decir, pago de sobornos. De Santibañes ha sido imputado por malversación de caudales públicos. A los legisladores justicialistas se les procesó por cohecho pasivo (recibir las coimas) y encubrimiento, lo que significa que
recibieron ese dinero sabiendo que pertenecía a fondos estatales .
Sin embargo, los ex senadores justicialistas, Ramón Ortega, Eduardo Bauzá, Javier Menenghini, Raúl Galván y Alcides López fueron sobreseídos por no hallarse pruebas en su contra.
Rafecas fue investigando meticulosamente la valiosa versión brindada por el ex secretario parlamentario Pontaquarto, quién confesó haber retirado 5 millones de la SIDE para
repartirlos entre senadores justicialistas con la intencionalidad de que aprobaran la ley de reforma laboral durante el gobierno de la Alianza, ley que posteriormente sería anulada por el congreso de la nación. Recordemos que Pontaquarto fue procesado luego de su primera confesión por el Juez Rodolfo Canicoba Corral junto a Fernando de Santibañes, Genoud y Cantarero. Pero la cámara federal revocó esto luego por considerar que habían puntos
demasiado débiles en la versión del arrepentido. Pero posteriormente, Rafecas lograría rellenar esos puntos gracias a su exhaustiva investigación.
Pontaquarto declaró haber sacado el dinero de la SIDE el 18 de abril del año 2000, pero tuvo que llevarlo a su casa porque ese día una protesta postergó la sesión donde se aprobaría la ley. Relató que una semana luego pagó con la mencionada suma en el departamento del salteño Emilio Cantarero. Precisamente, en esas horas y en esa zona de Barrio Norte de la Capital Federal se investigan los llamados telefónicos cruzados que involucran a los procesados.
Por su parte y ante lo muy delicado de su situación, Fernando de la Rúa optó por replegarse y delegar su defensa en
Ricardo Kirszenbaum , el abogado que hoy es el encargado de dar cuenta de la estrategia de defensa del ex jefe de estado.
Negamos la existencia del hecho en general y, entendemos que el doctor De la Rúa no tiene nada que ver con esos acontecimientos. La cámara de apelaciones tiene tres opciones: dictar la falta de mérito, confirmar o revocar procesamiento. Y, en caso de que lo confirme, existirá todavía la chance de defender nuestra posición hasta la corte suprema de justicia. Sin embargo, la cámara que confirmó su procesamiento, sostiene que el ex presidente tuvo el manejo causal de toda la operatoria que concluyó en el pago del soborno y que no fue ajeno a la maniobra.
No cabe ninguna duda que todos estos graves hechos de corrupción fueron una verdadera vergüenza para el gobierno de la Alianza y envolvieron en la oscuridad a toda la ciudadanía. Por estos sobornos renunció el entonces vicepresidente de la nación, Carlos Álvarez en octubre del año 2000 y 14 meses después, en diciembre de 2001, se produciría la caída del ex presidente. Es de esperar entonces, por el bien de todos los argentinos, que la causa se dirija hacia su etapa de esclarecimiento definitivo. Síntesis histórica de las coimas en el senado
- El 29 de mayo del año 2000 en plena presidencia de Fernando De la Rúa, el entonces ministro de trabajo, Alberto Flamarique dijo tener
la Banelco para comprar el voto de los legisladores del PJ, según afirmaron varios sindicalistas. Un mes después, se aprueba la ley de reforma laboral. En julio de 2000: Cafiero pide al senado que investiguen.
El 15 de agosto de 2000: el entonces vicepresidente de la nación, Carlos “Chacho” Álvarez, difunde un anónimo con detalles de esos sobornos…
- El 28 de agosto de 2000: Cafiero declara ante el primer juez que entendió en esta causa; Carlos Liporaci y dio los nombres de tres legisladores del PJ. Dos días después, Emilio Cantarero fue señalado como el senador que admitió cobrar el soborno…
- Setiembre de 2000: el juez Liporaci pide el desafuero para 8 senadores. El 6 de octubre: el vicepresidente Carlos Álvarez renuncia y se genera un gran escándalo. De la Rúa entonces, confirma en el gabinete a: Flamarique y el fefe de la SIDE, Fernando de Santibañes, quien se irá el 20 de octubre.
- El 6 de noviembre de 2000: el secretario del senado, Mario Pontaquarto, niega al juez Liporaci haber pagado los sobornos. La causa queda totalmente frenada.
- Tres años después: Pontaquarto se arrepiente y admite
haber repartido el 25 de abril del año 2000 los 5 millones que la SIDE le dio para que se aprobara la Ley de Reforma Laboral.
Mario Pontaquarto:
Esta es la síntesis de una excelente investigación El ex secretario del parlamento, Mario Pontaquarto durante la presidencia de Fernando De la Rúa y
“arrepentido” en la investigación de los sobornos en el senado de la nación para que se aprobara la ley de reforma laboral, destacó
la gran investigación que ha llevado a cabo el juez federal Daniel Rafecas y afirmó satisfecho que su autoincriminación y los entrecruzamientos de llamados telefónicos fueron clave para que el mencionado magistrado se decidiera a procesar a los 6 ex legisladores y a citar a una nueva declaración indagatoria al mismísimo ex presidente.
Esta es la conclusión de una gran investigación en donde muchos creían que la causa había finalizado con aquel increíble fallo de la cámara procesal que había sobreseído a todos los implicados afirmó sereno y satisfecho Pontaquarto.
Rafecas llevó a cabo un trabajo de investigación muy serio y arduo durante el cual tomó en persona las declaraciones indagatorias, los testimonios y encabezó cada uno de los procedimientos.
Me daba la sensación de que estaba muy abocado a la causa y quería llegar a la verdad y esto se pone de manifiesto en esta dura resolución. Mario Pontaquarto, confiesa haber participado, en principio, porque era el hombre de confianza de Genoud, que era el presidente provisional del senado y después, porque había estado ahí muchos años, Fui secretario del Senado y tenía una buena relación con los justicialistas. Era yo el nexo para negociar alguna ley.
El punto central fue la auto declaración en la que me auto incriminé y fui desarrollando los hechos. A lo que se suman los más de 120 entrecruzamientos telefónicos entre el teléfono fijo del senador Emilio Cantarero y los demás legisladores que Pontaquarto nombró ante la justicia.
También agregó:
Hay más de veinte pruebas fehacientes y de cómo fueron los hechos. Cualquiera que lea el fallo judicial las va a encontrar. Que De la Rúa le haya dicho a su edecán antes de que fuera a declarar que tuviera cuidado, o que si sabía bien lo que iba a declarar, me parece que lo pone en una situación bastante delicada. Es un tema que convulsionó la política. Esto no debe pasar para el tribunal como un juicio más, es el hecho más fuerte que pasó en la política. No hay que olvidar de que es la primera vez que un presidente queda procesado por cohecho. La Quinta Pata, 20 – 11 – 11
La Quinta Pata
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