domingo, 22 de abril de 2012

El tren en Mendoza

Pedro B. Sabella

Hoy EL BAÚL invita y paga el pasaje: viajemos por los ramales ferroviarios que surcaron la provincia, pero vistamos chambergo y corsé porque será con la óptica de los trajinados años ’30.

El autor de estos fragmentos, hombre de la política y de la educación, ya en 1907 había producido sus Lecciones de geografía de la Provincia de Mendoza especialmente destinada a la tarea escolar elemental, pero al promediar su carrera académica edita un tratado geográfico, aún hoy, de dimensiones excepcionales por la extensa y minuciosa información vertida, con detallada cartografía. Su título completo es cabal signo de la pretensión autoral: Tratado de geografía general, física, humana, económica y corográfica de la provincia de Mendoza: adaptadas al programa de enseñanza de la materia en las escuelas fiscales, precedidas de algunas ideas de geografía general, e ilustradas con numerosos mapas, planos y grabados diversos
Eduardo Paganini

[…] ¡ Cuánta diferencia se observa entre aquellas primeras máquinas raquíticas y de poca potencia; entre aquellos coches o wagones [sic] pequeños y sin mayores comodidades que formaban convoyes de marcha lenta y pesada, comparados con las potentes y enormes locomotoras y los confortables y magníficos coches dormitorios, pullman y comedores y con la velocidad vertiginosa con que corren sobre vías firmes y construidas en forma impecable, compitiendo favorablemente con los más afamados ferrocarriles europeos de hoy en día
Y si vamos un paso más allá y nos detenemos un poquito a considerar esas últimas creaciones del ingenio humano que nos permiten cruzar los espacios, transponer mares y montañas, arrebatando en una conquista soberbia el inconmensurable dominio de los cóndores y las águilas, muellemente ubicados en cómodas cabinas de una nave aérea, para hacer en breves horas, con una velocidad inimaginada e inimaginable el recorrido que requería un tiempo infinitamente superior, qué inmenso y grande es nuestro asombro.

¡Oh maravillas de la civilización del Siglo XX!

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FERROCARRILES.— Cuenta en la actualidad Mendoza, con tres líneas de ferrocarriles que la ponen en comunicación directa con el resto del país, dos de ellas y con la vecina república de Chile la tercera. Estas líneas son: el Ferrocarril de Buenos Aires al Pacífico, el Ferrocarril del Oeste y el Ferrocarril Trasandino Argentino.

Ferrocarril de Buenos Aires al Pacífico.— Esta línea de trocha ancha de 1 metro 676, que antes explotaban dos empresas distintas; la del Gran Oeste Argentino que abarcaba la línea de San Juan a Mercedes de San Luis y la del Pacífico, desde este último punto hasta Buenos Aires, constituye hoy un solo ferrocarril, desde San Juan hasta Buenos Aires y demás ramificaciones dentro y fuera de Mendoza. En los límites del territorio provincial la línea central y ramales del F. C. P. últimamente construidas recorren una extensión considerable, que se estima en unos 1120 kilómetros.

La línea principal, dentro del territorio provincial, desde las fronteras con San Juan hasta los confines con San Luis, tiene un recorrido de 240 kilómetros.

Los ramales que este Ferrocarril tiene construidos y en explotación en la Provincia, son:
Ramal Circuito Guaymallén, que arranca de la estación Mendoza hacia el N. E. pasando por las siguientes estaciones de tránsito: Tamarindos, Panquehua, Espejo, parada Teniente Benjamín Matienzo, parada Km. 21.3, Plumerillo, Lagunita, Buena Nueva, parada Km. 14.2, Capilla del Rosario, Rodeo de la Cruz, parada Km. 11.1, parada La Superiora, Pedregal, parada Km. 2.4 y empalme en Fray Luis Beltrán con la línea general. Tiene este ramal una extensión de 28 kilómetros.

Circuito Luján de Cuyo. Arranca de estación Mendoza, siguiendo la línea general hasta General Gutiérrez donde empieza el desvío en una curva cerrada hacia el S.O. pasando por las estaciones de Maipú, Russell, Cruz de Piedra, Lunlunta, Luján de Cuyo, parada kilómetro 15.4, Mayor Drumond, Gobernador Benegas, empalmando después con la línea principal, al aproximarse a la estación del Ferrocarril Trasandino, hasta el punto de partida para cerrar el circuito, con un recorrido de 16 y medio kilómetros.

Ramal a San Carlos. Sigue el circuito Luján de Cuyo desde donde se aparta el desvío hacia el S. cruzando el puente construido sobre el río Mendoza para pasar por las estaciones: Perdriel, Agrelo, Ugarteche, Anchoris, Zapata, Tunuyán, Vista Flores, Campo Los Andes, La Consulta y Eugenio Bustos, punto terminal de la línea. Su extensión es de 114 kilómetros.

Circuito Rivadavia. Sigue la línea general desde estación Mendoza hasta Palmira, de donde se abre el desvío que pasa por las estaciones: Jorge Newbery, Rodríguez Peña, Medrano, Los Árboles, Andrade, Rivadavia, Santa María de Oro, Philipps, hasta empalmar con la línea general y cerrar el circuito en Alto Verde, con un recorrido total de 45 kilómetros.

Ramal a Lavalle. Corre por el circuito Guaymallén hasta estación Espejo, desde donde arranca la línea que sigue por estación Gobernador Francisco J. Moyano, Sánchez de Bustamante, Gobernador L. Molina, Costa de Araujo, hasta Ingeniero Gustavo André, hoy punto terminal de la línea, con una extensión de 63 Km. 590 metros.

Ramal Palmira y Tres Porteñas. De Mendoza por la línea general hasta Palmira donde tiene su punto de arranque el ramal pasando por las estaciones: Gurruchaga, Chapanay y Tres Porteñas, punto terminal de la línea, hasta hoy, con un recorrido de 25 y medio kilómetros.

Ramal a San Rafael. Se inicia en estación Mendoza hasta Catitas desde donde arranca el desvío en dirección S. O. para pasar por las estaciones: Pichiciego, Comandante Salas, Ñacuñán, Arístides Villanueva, Guadales, Resolana, Cuadro Nacional y San Rafael. Extensión del ramal, 184 Km. 133 mts.

Ramal Guadales y Monte Comán. De estación Guadales, sobre la línea a San Rafael, sale un desvío hasta Monte Comán, continuando la línea a Buenos Aires, pasando por estaciones: Coico [sic], Gaspar Campos, Corral de Lorca, Valeria, Pampa del Tigre, Media Luna, etc.

Ramal Guadales y General Alvear. Desde estación Guadales por el ramal a Monte Comán, Real del Padre y General Alvear, con un recorrido de 59 kilómetros.

Ramal Monte Comán, San Rafael y Cuadro Nacional. De estación Monte Comán corre un ramal pasando por las estaciones: Rodolfo Iselín, Goudge, S. de las Rosas, Rincón del Atuel, Rama Caída, Pedro Vargas, Capitán Montoya, San Rafael y Cuadro Nacional, término del ramal que recorre una extensión de 97 Km. 326 metros.

Ramal Monte Comán e Ingeniero Ballofet. Finalmente, en esta región del Sur, un otro ramal del F. C. P. que tiene su punto de arranque en estación Monte Comán, llega hasta Ing. Ballofet pasando por las estaciones denominadas Negro Quemado y Villa Atuel con un recorrido de 44 y medio kilómetros.

Tales son las numerosas derivaciones que completan la red ferroviaria del Ferrocarril de Buenos Aires al Pacífico, cuya línea principal como lo dejamos expresado, corre desde San Juan pasando, dentro del territorio mendocino, por las siguientes estaciones, la mayoría de las cuales son centros urbanos importantísimos o lagares de gran movimiento comercial e industrial: Ramblón, Jocolí, Panquehua, Mendoza, Godoy Cruz, Luzuriaga, General Gutiérrez, Coquimbito, General Ortega, Rodeo del Medio, Fray Luis Beltrán, Barcala, Palmira, General San Martín, Ingeniero Giagnoni, Alto Verde, Santa Rosa, Catitas, Gobernador Civit, La Dormida, La Paz, Pampita y Desaguadero.

Desde estación La Paz, un desvío se aparta en dirección S.E. para empalmar con la línea vía San Luis cerca de Justo Daract pasando por las estaciones: Pirguita, Cadetes de Chile, Maquinista Levet, etc, etc. Esta línea es recorrida por los trenes de carga y los internacionales, los expresos, los especiales de excursión, preferentemente, pues no sólo es menor el kilometraje a recorrer, sino que esta vía facilita, por las condiciones del terreno, más llano y de menores pendientes, el desarrollo de mayores velocidades de los trenes, disminuyendo, por consiguiente, el tiempo en que se hace el recorrido de Buenos Aires a Mendoza. Los trenes por vía San Luis tardan por lo común 24 a 25 horas en salvar la distancia de la Capital Federal a la Capital de la Provincia; en cambio, por vía Beazley, lo hacen en 18 y hasta en 16 horas.

No podemos desconocer la indiscutible contribución del F. C. Pacífico en el progreso de Mendoza. Innumerables centros de población se han levantado al costado de sus vías y casi toda su zona de influencia favorece el desarrollo, cada día mayor de la industria y el comercio, en particular de la agricultura, vitivinicultura y fruticultura, a cuya prosperidad tanto ha contribuido ejerciendo, si bien es verdad, por falta de competidores, un verdadero monopolio del tráfico ferroviario en toda la Provincia, e imponiendo sus elevadas tarifas.

Ferrocarril del Oeste. Esta empresa ha tendido sus líneas también en la Provincia internándose por la región sur desde Buenos Aires hasta General Alvear, contribuyendo en forma bien apreciable a dar vida, y movimiento y a fomentar las industrias de aquellas ricas zonas cuya prosperidad, en tan corto tiempo, ha causado sorpresa a propios y extraños.

Ferrocarril Trasandino Argentino. Este Ferrocarril pone en comunicación a Mendoza y por intermedio de las demás líneas que a ella convergen, a todo el país con los pueblos de la vecina República de Chile. No hemos de sustraernos al deseo de hacer una particular mención de este Ferrocarril, hermoso vínculo de acero que une a dos pueblos hermanos, de cuya grandeza es factor eficaz y portentosa obra que revela la potencia de la inteligencia humana al salir triunfante y vencer todos los escollos, al parecer insalvables, opuestos a la realización de aquella maravilla, para dar lugar a que entrara abriéndose paso y brecha por entre el corazón mismo de la montaña, ese mensajero de paz, de progreso y de civilización sudamericana.

El Ferrocarril Trasandino, hace honor a la empresa que lo construyó y muy especialmente a los hábiles y sabios ingenieros que lo trazaron.
Hay que recorrer esa línea; hay que sentir las emociones del viaje por ella y hay que contemplar esas obras para darse cuenta cabal de su magnitud.
Todo turista que haya conocido el trayecto total del F. C. Trasandino, ha de haber sentido y ha de conservar, seguramente, el recuerdo de las impresiones tan variadas y tan bellas que producen en el espíritu la contemplación de esos paisajes tan soberbios y tan raros.
Desde que el convoy sale de Mendoza, y en continuo serpenteo se dirije [sic] al O., el viajero se siente presa de emociones indescriptibles; emociones que crecen y se hacen más fuertes y violentas cuando el convoy se hunde en la boca de los túneles, cuando cruza veloz valles y llanuras que acaban, al parecer allí mismo; cuando precipita hasta producir la ilusión de que va a chocar con las rocas y que va a incrustarse en ellas, para sólo deslizarse a un palmo de distancia de las mismas, y cuando en continuo zig-zag, reptil colosal poseído de mil furias devora distancias para detener su fatigosa carrera en las altísimas cumbres, desde donde puede contemplarse el panorama más bello que sea dado admirar a la criatura humana.
La ascensión a los altos niveles se hace mediante el sistema de cremallera en un trayecto de 14 kilómetros alcanzando la mayor altura de 4.600 metros más o menos, sobre el nivel del mar.
La línea del F. C. Trasandino es de trocha angosta; arranca en la ciudad de Mendoza, centro de su administración, talleres y estación inicial y termina en la frontera misma con Chile, desde donde continúa la línea del F. C. Trasandino de dicho país, atravesando el gran túnel definitivamente terminado de 3 Km. 100 metros, correspondiendo 1 Km. 700 metros a la sección lado argentino y el resto, 1 Km. 400 mts. al lado chileno.
Recorre el F. C. Trasandino Argentino unos 179 kilómetros desde la estación Mendoza y pasa por las estaciones siguientes:
Paso de los Andes (Chacras de Coria), Blanco Encalada, Cacheuta, Potrerillos, Uspallata, Zanjón Amarillo, Puente del Inca, Punta de Vacas, Cuevas [sic], La Cumbre.

Hace poco la Empresa de este Ferrocarril resolvió establecer un paréntesis a sus actividades, suspendiendo los servicios en toda la línea, en razón a su difícil situación económica. Hoy, mediante convenios celebrados entre los gobiernos de los dos países cuyos intereses comerciales e industriales se ven afectados seriamente por la paralización del tráfico de esta vía férrea, la Empresa ha resuelto la reanudación, si bien muy limitada de los servicios de trenes de pasajeros que sólo corren una vez por semana. La última gran crecida del río Mendoza y sus afluentes cordilleranos causaron tan serios y graves destrozos en las vías de este Ferrocarril que tardarán aún algún tiempo en ser reparadas y en dejar expedita la línea total.

Ferrocarril Industrial. La provincia tiene construido un ramal férreo sistema Decauville desde estación Zapata del F. C. P. a Tupungato, el que, a pesar de las deficiencias que se observan en sus servicios, no deja de prestar señalada utilidad a esa región, facilitando el acceso de pasajeros y el transporte rápido de productos hasta un punto seguro de embarque de aquel otro ferrocarril.

Líneas férreas proyectadas. Los Ferrocarriles del Estado proyectan tender sus líneas en Mendoza, satisfaciendo, de tal suerte, un anhelo común del comercio y de la industria y del pueblo todo de la Provincia que, desde hace mucho tiempo, vienen clamando por la construcción de una línea férrea que ponga en contacto directo a esta región con las provincias del Norte y del Centro y que pueda dar fácil salida a los productos de esta zona por otro conducto que no sea el que ofrece el único ferrocarril actualmente en explotación. La Nación encaró últimamente la solución de este problema de tan vital importancia para esta parte de la región cuyana, y fue así cómo, el año 1930, durante la Intervención Nacional en la Provincia a cargo del señor Carlos Borzani, se dio comienzo a la ejecución de los trabajos de la línea ferroviaria que teniendo su punto de arranque en Guaymallén, iría a empalmar con el Ferrocarril Argentino del Norte, sección San Juan, a Serrezuela, en el punto denominado Pie de Palo. Los trabajos adquirieron particular actividad, ocupándose numerosos obreros y en poco tiempo se terraplenaron varios kilómetros de vía, calculándose que en término relativamente corto, la línea quedaría totalmente terminada. Pero un repentino suceso político ocurrido en el país —la revolución del 6 de septiembre de ese mismo año, produjo un cambio total en el gobierno y en el régimen político de la República y las obras del Ferrocarril a Pie de Palo fueron paralizadas. A su pesar, la opinión pública se agita nuevamente en la Provincia, clamando del nuevo gobierno constituido la prosecución de los trabajos y la terminación de este ramal que está llamado a satisfacer una necesidad imperiosa de la vida económica de la Provincia en general y a impulsar las actividades agrícolas de la vasta y rica zona norteña de Mendoza (en la actualidad, el H. Congreso Nacional sancionó una ley creando fondos para proseguir las obras de este Ferrocarril y los trabajos se empezaron a realizar desde la Estación Pie de Palo, hallándose, a esta fecha ya enrielada una considerable extensión kilométrica y pronta a ser librada al servicio público la parte de línea ya terminada).

Geografía general de la Provincia de Mendoza , Imprenta Oficial de la Federación y la Escuela de Artes Gráficas para Penados, 1936. 613 págs.

Baulero: Eduardo Paganini

La Quinta Pata, 22 – 04 – 12

La Quinta Pata

1 comentario :

Camila dijo...

Debido a que ya tengo mis pasajes a
mendoza
, voy a poder volver a mi maravillosa ciudad y disfrutar de esta y de todas las atracciones que tiene nuestra provincia

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